En el Código Civil Ecuatoriano se establece que el contrato es un acuerdo de voluntades entre dos o más personas para crear, regular, modificar o extinguir relaciones jurídicas patrimoniales. Es decir, es un acuerdo que tiene como finalidad establecer obligaciones y derechos para las partes involucradas.
Elementos esenciales del contrato
Según lo establecido en el Código Civil Ecuatoriano, un contrato debe contar con los siguientes elementos esenciales:
- Consentimiento de las partes: es decir, que ambas partes estén de acuerdo con los términos establecidos en el contrato.
- Objeto lícito: el objeto del contrato debe ser legal y no contrario a las leyes.
- Causa lícita: la causa del contrato debe ser legal y no estar en contra de las leyes.
Tipos de contratos
Existen diversos tipos de contratos en el Código Civil Ecuatoriano, algunos de ellos son:
- Contrato de compraventa: en este tipo de contrato una de las partes se obliga a transferir la propiedad de una cosa y la otra parte se obliga a pagar un precio por dicha cosa.
- Contrato de arrendamiento: en este tipo de contrato una de las partes se obliga a ceder el uso y goce de una cosa a la otra parte, a cambio de un pago periódico.
- Contrato de trabajo: en este tipo de contrato una de las partes se obliga a prestar sus servicios a la otra parte, a cambio de una remuneración.
- Contrato de sociedad: en este tipo de contrato dos o más personas se unen para desarrollar una actividad económica en común.
Importancia del contrato
El contrato es una herramienta fundamental en el ámbito jurídico y empresarial, ya que permite establecer acuerdos claros y precisos entre las partes involucradas. Además, el contrato brinda seguridad jurídica a las partes, ya que establece las obligaciones y derechos de cada una de ellas, lo que evita posibles conflictos en el futuro.
Conclusión
el contrato es un acuerdo de voluntades que tiene como finalidad establecer obligaciones y derechos para las partes involucradas. Es importante que el contrato cuente con los elementos esenciales y que el objeto y causa del contrato sean legales. Los contratos son herramientas fundamentales en el ámbito jurídico y empresarial, ya que permiten establecer acuerdos claros y precisos entre las partes involucradas, lo que brinda seguridad jurídica y evita posibles conflictos en el futuro.